Los datos son el nuevo suelo, son un ambiente fértil para la creatividad, donde es posible navegar por este mar de información. En este ambiente fértil las infografías y visualizaciones de datos crecen como flores en nuestro mundo digital. Los datos son más que tablas y números, si los vemos directamente pueden resultar hechos desconectados y sin relación aparente, pero cuando empezamos a trabajar con ellos y expresarlos de diferentes maneras empiezan a suceder cosas interesantes y algunos patrones comienzan a surgir. Las gráficas pueden contarnos una historia, enriquecer un discurso, identificar datos distintos o relevantes, comparar variables y mucho más de una manera fácil y efectiva. Existen muchos tipos de gráficas y cuadros disponibles por lo que seleccionar el adecuado para nuestros datos y pregunta de investigación es crucial. El no realizar este proceso de selección de manera consciente puede llevarnos a malas visualizaciones, las cuales pueden ser difíciles de entender y podrían distorsionar lo que los datos nos pueden contar.

 

Actualmente existen muchas herramientas simples que nos pueden ayudar a mejorar nuestras gráficas sin embargo sigue siendo fundamental el tener un buen entendimiento de nuestros datos y una acertada selección visual para poder interpretarlos